Para elegir el método anticonceptivo más adecuado para ti, piensa en tu estilo de vida, preferencias personales y estado de salud.
También es importante que pienses sinceramente en ti, tu pareja y tu relación. Es posible que tus necesidades de anticoncepción cambien en función de la frecuencia de las relaciones sexuales o de si tienes una relación monógama.
Idealmente, deberás encontrar una solución adecuada para ti y para tu pareja.